Desde que los antiguos griegos especularon por primera vez que todo lo que observaron en realidad era el resultado de la interacción de pequeñas partículas que llamaron átomos, los grandes pensadores han tratado de encontrar una fórmula matemática única que gobierne y explique el funcionamiento de todo el universo. Hasta ahora, sin embargo, incluso las mentes tan brillantes como los físicos Albert Einstein y Stephen Hawking no han podido llegar a esa gran ecuación de todo, también conocida como la teoría de todo o la teoría final. Sin embargo, continúan intentándolo, porque sin esa pieza final del rompecabezas que es la realidad, la suma total de lo que sabemos no tiene sentido.