Doug y tito llevan sus uniformes Bluff-Scout a la escuela para prepararse para el próximo Shindiggarama. Doug se ríe y concluye que los Bluff-Scouts son "cosas para niños", así que se retira. Doug comienza a pensar que los deberes Bluff-Scout son pueriles y buscan un ambiente más adulto. Doug entonces intenta vivir una vida más adulta hablando y vestirse como un adulto. Una fiesta madura en la casa de Ruffo le hace darse cuenta de que no se está divirtiendo como un adulto porque le importaba demasiado lo que la gente piensa. Doug vuelve a Bluff-Scouts y se divierte en el Shindiggarama, dándose cuenta de que Bluff-Scouts le ha dado muchas habilidades que necesitará como adulto.