Una de los pacientes de Danny resulta ser una mamá bloguera, así que le invita a escribir sobre Schulman y Asociados en su página web. Después, descubren que ella es, en realidad, una mujer blanca súper racista y que dice que los médicos de la clínica son también racistas. Desesperados por controlar la situación, el equipo contrata a una relaciones públicas, Priscilla, que anima a que Danny sea quien trasmita a los medios el error que se ha producido.