Danny es contratado para hacer una restauración completa de un Mustang Convertible del 66. Desafortunadamente, cuando se desmonta el coche, descubren que no hay mucho coche entre sus parachoques. Danny tiene que decidir entre pedirle más dinero al cliente o perder un montón. Mientras tanto, la tienda se enfrenta a otro desafío en forma de un Packard clásico que necesita atención, y Horny Mike y Ryan encuentran a un tipo único con algunos coches muy únicos.