Basado en la telenovela homónima de 1991, Yo no creo en los hombres gira en torno a una familia adinerada, de la que forman parte la madre Úrsula, viuda de Santibáñez, y los hijos Daniel y Maleny. María Dolores, una joven dulce, se enamora de Daniel, quien la seduce y la abandona después, casándose con otra mujer. Sin embargo, Daniel decide vovler a ver a María Dolores e intenta abusar de ella, pero, en el forcejeo, Daniel acaba muerto. La mujer, culpada por la muerte del hijo de Úrsula, es condenada a 30 años de prisión. Tras jurarse no volver a querer a ningún hombre, María Dolores sale de la cárcel y conoce a un abogado, Maximiliano, quien se enamora de la protagonista e intenta conseguir que ella vuelva a creer en el amor.