Después de una noche de borrachera, el comisario Larosière se despierta con el cadáver de una joven en su cama. No recuerda lo que pasó y se da cuenta con horror de que ahora es el sospechoso número uno en un caso de asesinato. Sobre todo porque la joven es una prostituta que trabajaba en un burdel donde Larosière tenía sus hábitos. Mientras Larosière está encarcelado, Lampion lucha por demostrar la inocencia de su jefe. El comisario consigue escapar y, escondido en el interior del burdel, dirigirá la investigación de Lampion para encontrar al verdadero asesino...