Debbie Strong (Jodi Lyn O’Keefe) es una enferma mental que escapa de la clínica en la que había sido internada por doble asesinato. Poco después, adopta la personalidad de su tercera víctima, Tracey Carley, una alumna universitaria. Debbie sigue la vida de Tracey, asistiendo a las clases con normalidad. Entre ella y su profesor de Literatura, Sam, surge una fuerte atracción que acabará en romance. Lo malo es que él tiene novia y que Debbie está dispuesta a todo para que nadie se interponga en su camino.