Se detalla en los Evangelios de Mateo, Marcos y Lucas. De acuerdo con estos textos, después de ser bautizado por Juan el Bautista, Jesús ayunó durante cuarenta días y cuarenta noches en el desierto de Judea. Durante este tiempo, Satanás se le apareció a Jesús e intentó tentarlo. Después de haber rechazado cada una de las tentaciones de Satanás, Jesús regresó a Galilea para comenzar su ministerio.