Un abogado defensor implacable -utilizando métodos heterodoxos- destroza a Monk como testigo exponiendo todos sus "problemas", y el jurado declara inocente al asesino. Durante el juicio, Randy se encuentra en la Corte con un joven conocido suyo acusado de asesinato, a quien le ofrece su ayuda junto a Monk, resultando que había una conexión entre ambos casos.