El estudiante de secundaria Saito Hojo se casó con su compañera de clase, Akane Sakuramori, una chica que había sido su mayor enemiga en la escuela. La vida de recién casados no fue tan ideal como esperaban, ya que constantemente peleaban. Sin embargo, a medida que pasaban más tiempo juntos, la distancia entre ellos se reducía gradualmente. Empezaron a disfrutar cada vez más de los momentos compartidos y, con el tiempo, comenzaron a entenderse mutuamente. Saito descubrió el lado dulce de Akane, que antes no había notado, y Akane poco a poco comenzó a reconocer los sentimientos que había mantenido ocultos.