La premisa del concurso consiste en que los participantes estarán divididos en dos grupos, unos viviendo "la vida del futuro" y otros "la vida del pasado". Los dos mundos presentes en la vivienda fueron separados por un muro de vidrio, permitiendo que ambos grupos puedan observar las acciones del otro; la interacción directa entre los dos grupos de participantes se da en el patio, denominado como "el presente". Los participantes de los dos grupos existentes compiten cada semana en diversas pruebas físicas para determinar qué grupo vivirá en el pasado y cuál en el futuro, y determinar cuál será el participante eliminado de la competencia.