Los desiertos no son hábitats fáciles para los animales. Los habitantes del desierto han evolucionado para adaptarse al calor y la falta de agua. Han adaptado sus organismos y su comportamiento al clima desértico. El escorpión, que existe desde que la vida salió del mar hacia tierra firme, es uno de los animales más antiguos del planeta. Observándolo, es fácil comprender por qué es un superviviente nato.