Una vasca fría y cortante, un andaluz enamorado del amor y una sevillana a la que le gusta el ‘sexo duro’, han sido los protagonistas de la tercera entrega de Adán y Eva. A pesar de que Carlos, de Jeréz, y Maite, una bilbaína abanderada, han chocado desde el primer momento por sus diferentes personalidades, nuestro Adán ha decidido comenzar una historia de amor con la vasca, rechazando a Verónica y a sus eróticas esposas de cuero negro.