Laura es lo único que le queda a Paca ahora que la familia de su hija puede abandonar El Acebuche. Las hermanas Molina quieren que se quede en Las Sabinas a pesar de que Emilio tenga el corazón roto por ver que la historia se repite. La detención de Jiménez no es alivio suficiente para Manuela. Tal vez deba darse el tiempo que necesita para despedirse de quien ha amado.