Francisco ahora está al tanto de la venganza de María y queda con ella en que le dará todo lo recopilado sobre Enrique en estos años para hundirle. Pero Enrique, que ya conoce la adicción de María a los opiáceos, vuelve a presionar a María para que deje su adicción bajo supervisión médica. María no puede negarse para no levantar sospechas, pero otra vez se encontrará contra las cuerdas al tener que pasar el síndrome de abstinencia. Pablo, por su parte, está muy tocado tras su ruptura con Eva, y no podrá evitar confesarle a María sus verdaderos sentimientos. María se enfadará con él por mezclar las cosas. ¿Serán capaces ambos de seguir adelante con la venganza estando el amor de por medio? Paralelamente, Enrique le exige a Juan que sea impecable con Helena, pues Miriam se ha quejado de que la pareja está en crisis tras la vuelta de María. Juan tendrá que reconquistar a su novia. Mientras tanto Amparo quiere encontrarle algún punto débil a Enrique, que le está haciendo la vida imposible en la casa, y descubrirá un secreto de Enrique que no sabe nadie más. ¿Qué será capaz de hacer Amparo con esta información? Enrique, sospechando que Francisco pudiera estar detrás de los anónimos y chantajes, manda a Álex que pinche el teléfono de su cuñado. Lo que escuchará ahí, le llevará a tomar una decisión tan drástica e inesperada, que cambiará la vida de todos para siempre.