Carolina cumple dieciocho años. Para celebrarlo, a Ana se le ocurre organizar una fiesta al estilo de los años cincuenta. La idea entusiasma a todos excepto a la propia Carolina, quien ese dia participa en un acto reivindicativo de la ONG. Carolina se debate entre asistir a la fiesta o estar con sus compañeros de la ONG. David le enseña a Ana posturas de yoga para relajar el cuerpo. La amistad entre ambos va a más. Aunque no son pareja, salen a cenar juntos con amigos comunes. Actitud que suscita el enfado de Fernando.